Día del perro callejero: Estrategias empresariales para ayudar a los lomitos
Un perro callejero sobrevive diariamente a miles de peligros, si quieres que tu empresa se vuelva su ángel guardián, sigue estos puntos.
Un perro callejero sobrevive diariamente a millones de peligros. Puede ser atacado por miles de cosas, desde personas violentas hasta otros animales. Incluso vive de forma continua el riesgo de ser atropellado.
En México existen cerca de 28 millones de lomitos, de ellos, el 70 por ciento se encuentra en situación de abandono y se cree que esta cifra crece anualmente un 20 por ciento, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies (AMMVEPE).
Te recomendamos este videoPara brindarles a los lomitos otra alternativa de vida, actualmente existen varias asociaciones que les brindan refugio, además de alimento. Generalmente ese tipo de organizaciones también los ponen en adopción.
A la par, hay instituciones que esterilizan a las mascotas con el fin de ayudar a disminuir la tasa de perros en situación de abandono.
Si tienes una empresa y tu sueño es ayudar a cada perro callejero que te encuentras, pero no tienes las herramientas necesarias para generar tu propia asociación, puedes comenzar a ayudar a los lomitos de diversas formas.
Así puede ayudar tu empresa a un perro callejero
Como empresa, puedes ayudar a las organizaciones que buscan ayudar a los perros callejeros de distintas formas. Una de ellas es donar fondos, otra, es generar programas de voluntariado. Pero también existen otras opciones que puedes explorar.
1. Donar fondos
Las empresas pueden donar fondos o proporcionar patrocinio a organizaciones sin fines de lucro que se dediquen al rescate, cuidado y adopción de perros callejeros. Estos fondos pueden ayudar a cubrir los costos de atención médica, alimentación, albergue y otros gastos relacionados.
Día Internacional del Chocolate: ellas lideran la industria y ponen en alto el nombre de México
Muchas organizaciones que se dedican a rescatar a los animales buscan diariamente nuevas fuentes de ingreso debido a que en sus instalaciones hay un sobrecupo de habitantes.
2. Comenzar programas de voluntariados
Las empresas pueden alentar a sus empleados a participar en programas de voluntariado que impliquen cuidar y apoyar a los perros callejeros. Esto podría incluir visitas a refugios, pasear a los perros, ayudar en eventos de adopción o brindar habilidades profesionales que puedan ser útiles para las organizaciones de rescate.
Cada una de las empresas puede premiar a sus empleados por sumarse a este tipo de iniciativas. Los líderes, por ejemplo, pueden repartir horas libres o regalar vales de despensa para hacer que sus trabajadores se interesen mucho más en apoyar a los perros callejeros.
3. Diseñar campañas de concientización
Las empresas pueden utilizar sus recursos de marketing y alcance para crear campañas de concienciación sobre la situación de los perros callejeros y la importancia de la adopción responsable. Esto puede ayudar a sensibilizar a la comunidad y fomentar la adopción en lugar de la compra de animales.
De cara al Día Internacional de la Mujer, #MiVozSeEscucha
Cada empresa tienen una audiencia y un alcance distinto. Si el mensaje de ayuda a los caninos se multiplica y llega al público desde distintos lugares, se vuelve más fácil sensibilizar a las personas.
4. Promover la adopción responsable
Las empresas pueden promover la tenencia responsable de mascotas mediante la educación sobre la importancia de la esterilización, la identificación de mascotas con microchips y el cuidado adecuado de los animales.
Algunos dueños de mascotas, sin saberlo, pueden maltratar a sus compañeros perrunos. Por ejemplo, cuando no tienen tiempo de salir a pasear con ellos y hacer actividad física los someten a una gran cantidad de estrés. Para que los colaboradores sepan reconocer este tipo de actitudes es mejor que se sensibilicen.
5. Colaborar directamente con las asociaciones para ayudar a los perros locales
Las empresas pueden colaborar directamente con organizaciones de rescate locales para desarrollar programas conjuntos que beneficien a los perros callejeros de la zona.
Por ejemplo, mientras una tienda de abarrotes dona comida a los animales, un negocio de naves industriales podrá brindarles refugio a los canes.