Jeep FRENA operación en México por aranceles a autos: ‘Habrá pausa temporal’
La marca Jeep anunció una pausa de producción en México y Canadá, tras el impacto directo de los aranceles impuestos por Estados Unidos.
Los aranceles a los autos ya están generando un fuerte sacudón en la industria automotriz y, ahora, también en México. Stellantis, el gigante detrás de marcas como Jeep y Ram, anunció esta semana una pausa temporal en sus operaciones debido a los nuevos aranceles del 25% impuestos por el gobierno de Estados Unidos, medida que ya está teniendo efectos en sus plantas en Canadá y nuestro país.
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De acuerdo con Bloomberg este anuncio llega en un momento tenso para el comercio internacional, justo cuando los aranceles a autos importados entraron en vigor este jueves 3 de abril. La primera planta en apagar motores será la de Windsor, Ontario, que suspenderá operaciones por al menos dos semanas a partir del lunes 7 de abril.
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Sin embargo, México también está en la mira: aunque la compañía no ha confirmado fechas, ya adelantó que la pausa también se extenderá a sus centros de trabajo en territorio nacional.
Jeep frena operaciones en México por aranceles a autos
La decisión de pausar temporalmente la producción responde a una necesidad inmediata de reajustar toda la cadena de suministros.
Según comunicó la propia Stellantis, las nuevas medidas comerciales de Trump han generado un efecto dominó, obligando a modificar los procesos tanto en las plantas de ensamble como en instalaciones de estampado y ejes motor en Estados Unidos.
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Aunque aún no hay una fecha oficial para reanudar la actividad en México, todo apunta a que el impacto será significativo. Esta pausa forma parte de una estrategia más amplia para mitigar los costos adicionales que representan los nuevos aranceles a autos, los cuales podrían encarecer varios modelos y desincentivar la importación de unidades ensambladas fuera de EE. UU.
¿Cómo afectará esta pausa a los trabajadores?
En Canadá, el cierre afectará a unos 4,500 empleados, quienes fueron notificados mediante un memorando interno. En él, Stellantis reconoce que se trata de un momento complicado para la industria, pero también insiste en que esta medida es temporal y busca mantener la estabilidad operativa a largo plazo.
En México, se espera que miles de trabajadores también se vean impactados, especialmente en las regiones donde la marca tiene operaciones de ensamble o proveeduría. Además, la pausa podría repercutir en proveedores y empresas que dependen directamente de estas líneas de producción.