Trump advierte: México no venderá ni un solo auto en EE.UU. con nuevos aranceles

El candidato republicano Donald Trump ha intensificado sus amenazas de imponer aranceles de hasta un 200% sobre los automóviles de México si llega a ser reelegido presidente en 2024.

Esta medida tiene como objetivo evitar que los vehículos fabricados en México ingresen al mercado estadounidense, con la intención de proteger la industria automotriz de EE.UU.

No permitirá que los automóviles de México “destruyan” Detroit

Durante una entrevista en Fox News y un mitin en Wisconsin, Trump aseguró que no permitirá que los autos mexicanos “destruyan” la industria automotriz de Detroit y que está dispuesto a imponer cifras tan altas que harían inviable la importación de autos desde México a Estados Unidos.

Anteriormente, Trump había mencionado aranceles del 100%, pero en sus recientes discursos duplicó esta cifra, afirmando que no le importaría llegar hasta el 200% o más si fuera necesario.

La industria automotriz de México exportó cerca de 3 millones de vehículos a EE.UU. en 2023, y empresas como Ford, GM y Stellantis dependen en gran medida de sus fábricas en México para abastecer al mercado estadounidense.

Expertos advierten que estos aranceles podrían elevar significativamente el costo de los autos, tanto importados como fabricados en EE.UU., afectando también el mercado de autos usados. Además, esta política podría generar represalias comerciales por parte de México, lo que complicaría aún más las relaciones comerciales entre ambos países.

¿A quiénes afectaría la medida?

Los aranceles propuestos no solo afectarían a los grandes fabricantes, sino también a los consumidores, que verían aumentos en los precios de los vehículos. Las empresas podrían verse obligadas a trasladar parte de su producción de vuelta a EE.UU., lo que podría incrementar los costos de fabricación y reducir la competitividad.

Trump ya había utilizado una estrategia similar en su mandato anterior, lo que resultó en la renegociación del T-MEC en 2018, que incluyó disposiciones para aumentar la producción automotriz en EE.UU.

Si Trump cumple con estas amenazas, las compañías automotrices podrían verse obligadas a revisar sus cadenas de suministro y buscar alternativas para evitar los costos adicionales. Sin embargo, el impacto a corto plazo sería más difícil de mitigar, ya que muchas de las fábricas en México son claves para las operaciones de los grandes fabricantes.