Muere el cantante Fito Olivares, compositor de ‘Juana la Cubana’ y ‘El Colesterol’
El cantante y saxofonista, Fito Olivares, creador de varios éxitos como Juana la Cubana y El Colesterol, falleció a sus 75 años […]
El cantante y saxofonista, Fito Olivares, creador de varios éxitos como Juana la Cubana y El Colesterol, falleció a sus 75 años de edad, informó su familia.
Sus últimos meses de vida los vivió luchando contra una grave enfermedad.
Te recomendamos este videoEn una entrevista, la esposa del músico originario de Tamaulipas, México, reveló la noticia. Detalló que al cantante se le diagnosticó un agresivo cáncer en avanzado estado.
“Desgraciadamente tuvo una muy mala noche y aquí estuve con él todo el tiempo. Sabía que estaba muy cerca y desgraciadamente pasó hace un momento”, mencionó Gris Olivares.
Fito Olivares murió a causa del cáncer de células plasmáticas que le fue detectado desde hace ocho meses; sin embargo, cuando le fue detectado ya se encontraba muy avanzado, por lo que los médicos únicamente le indicaron el tiempo de vida restante.
“Él nunca supo, ni yo ni nadie nos imaginábamos que podía tener cáncer, fue diagnosticado hace unos ocho meses, pero tampoco nos imaginamos qué tan grave iba a ser. Los doctores le dieron un tiempo, a él le dijeron que tantos meses, entonces, gracias a Dios duró un poquito más de lo que los doctores nos dijeron, pero sí estaba ya muy avanzado su cáncer”, mencionó la esposa del músico.
¿Quién fue Fito Olivares?
Fito Olivares nació el 19 de abril en Tamaulipas, México. El primer instrumento que aprendió a tocar fue una armónica que le compró su padre, quien también era saxofonista.
A los 12 años aprendió a tocar el saxofón y siendo aún adolescente, se involucró de lleno en la música. Para 1962, lo invitaron a formar para del Dueto Estrella, donde aprendió a tocar el acordeón.
La primera canción que compuso fue Ya no eres mía. En 1980 crea Fito Olivares y su Grupo, con quienes compuso Juana La Cubana, tema que lo llevó a presentarse en programas como Siempre en Domingo.
Tras el éxito obtenido, con el pasar de los años Fito Olivares creó su propio estudio de grabación, Japonica Studio, así como su editora, Sabrosura Music, con la que registró sus canciones.