Este botón del refri te ayuda a pagar menos en tu recibo de luz (y casi nadie lo activa)

Un simple ajuste en tu refri puede impactar directamente tu recibo de luz. Pocos lo usan, pero hace una gran diferencia.
¿Has notado que tu recibo sube sin razón aparente? Tal vez el problema esté en tu refrigerador. Este electrodoméstico trabaja las 24 horas y, aunque es indispensable, también es uno de los que más energía consume. Lo que pocos saben es que hay una manera muy sencilla de pagar menos luz: ajustar el termostato correctamente.
¿Cuál es el botón que casi nadie activa y te ayuda a pagar menos luz?
En casi todos los refrigeradores hay una perilla o botón que regula la temperatura interna. Muchos la dejan en el mismo nivel todo el año, pero ese pequeño detalle puede hacer que el motor trabaje de más y consuma más electricidad.
Te recomendamos este videoEste botón es el termostato y usualmente tiene niveles del 1 al 5 o del 1 al 6. Ajustarlo según la temporada o la cantidad de alimentos dentro del refri puede hacer una gran diferencia.
¿Cómo configurarlo según la temporada?
- Verano: Las altas temperaturas hacen que el refri tenga que esforzarse más. Ajusta el termostato entre niveles 4 y 5.
- Invierno: Las temperaturas exteriores son más frías, así que puedes bajarlo a nivel 2 o incluso 1.
- Temperaturas ideales:
- Refrigerador: entre 2 °C y 5 °C
- Congelador: -18 °C
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Tips adicionales para ahorrar energía y pagar menos luz
Además del termostato, hay otros hábitos que ayudan a pagar menos luz con tu refrigerador:
- No lo sobrecargues: demasiada comida bloquea la circulación del aire frío.
- Evita abrirlo muchas veces: cada vez que abres la puerta entra aire caliente.
- Descongela el congelador: el exceso de hielo reduce la eficiencia.
- Limpia las bobinas: si están sucias, el refri consume más energía.
- Ubícalo estratégicamente: lejos de fuentes de calor como la estufa o luz solar directa.
- Revisa el sello de la puerta: una goma dañada deja escapar el frío.
Alimentos que no van en el refri
Saber qué guardar (y qué no) también ayuda al rendimiento del aparato. Estos alimentos se conservan mejor fuera del refrigerador:
- Tomates: pierden sabor y textura.
- Plátanos: se oscurecen y su maduración se altera.
- Papas: el frío convierte su almidón en azúcar.
- Cebollas: la humedad acelera su descomposición.
- Pan: se endurece más rápido.
Un pequeño cambio, un gran ahorro
Un simple movimiento en el termostato puede ser la clave para reducir tu consumo eléctrico. Hacerlo no solo cuida tu bolsillo, también extiende la vida útil del refrigerador.
Así que ya sabes: revisa cómo tienes configurado tu refri y empieza a pagar menos luz desde hoy.