¿Por qué cuando se tiene Diabetes se orina mucho?

Tener mucha sed y constantes ganas de orinar son síntomas por los que el Médico puede sospechar que una persona tiene Diabetes, incluso sin tener a la mano estudios que indiquen niveles altos de la glucosa o azúcar en la sangre, explica Christian Acevedo Paredes, médico familiar y diabetólogo. 

Si bien, tener frecuentes ganas de orinar también puede ser indicio de una infección urinaria, cuando se tiene Diabetes se debe a una elevada concentración de glucosa en la sangre, generalmente arriba de 180mg/dl. Cuando se presentan estos síntomas es posible que se tengan semanas, meses e incluso años con la glucosa elevada.

Más azúcar = más orina

Y es que esto es parte de un círculo vicioso. Cuando los niveles de azúcar en sangre están elevados, el cuerpo trata de compensar este exceso y eliminarla, el camino más fácil es por medio de los riñones, a través de la orina. Cuanto mayor es la glicemia (concentración de glucosa en la sangre), se elimina más orina.

Otra causa es la vejiga hiperactiva, que se da porque la glucosa elevada daña los nervios de la vejiga, provocando que los músculos se contraigan sin aviso y, por lo cual, aumenta la frecuencia en que se orina.

Cuando se orina repetidamente es necesario tomar medidas al respecto porque si ocurre una deshidratación puede volverse severa y convertirse en una razón que amerite hospitalización.

¿Qué hacer?

Si tienes sobrepeso u obesidad, orinas frecuentemente, tienes mucha sed y mucha hambre pero, a la vez, pierdes peso será mejor acudir al Médico para tener un diagnóstico lo antes posible.

Si ya tienes diagnosticada la Diabetes, debes acudir al Doctor para descartar que este síntoma sea por alguna infección urinaria, verificar cómo están tus niveles de glucosa y, si es necesario, reajustar tu tratamiento.

Además será de gran ayuda si tú:

→ Monitoreas tus niveles de glucosa la sangre. 
→ Tomas muchos líquidos, agua natural es lo más recomendable, para evitar deshidratación al estar orinando constantemente. Elimina los jugos, refrescos o aguas azucaradas porque al contener azúcar agravan la situación.