¿Es delito no presentar la declaración anual? Te explicamos si podrías ir a prisión

Omitir tu declaración anual puede traer multas e incluso consecuencias penales. Aquí te explicamos los riesgos y cómo evitarlos.
Cada año, millones de contribuyentes en México se enfrentan a una pregunta clave: ¿qué pasa si no presento mi declaración anual?
Más allá de una simple omisión, esta falta puede tener consecuencias legales que van desde multas económicas hasta sanciones penales.
Te recomendamos este videoAunque suena extremo, es importante entender que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) tiene herramientas legales para actuar en casos de evasión fiscal.
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¿Quién está obligado a presentar la declaración anual?
La declaración anual es una obligación fiscal que deben cumplir personas físicas y morales ante el SAT.
Según el artículo 150 de la Ley del Impuesto sobre la Renta (ISR), deben presentarla todas las personas físicas que hayan obtenido ingresos por:
- Sueldos y salarios si trabajaron para más de un patrón.
- Actividades empresariales o servicios profesionales.
- Renta de bienes inmuebles.
- Venta de bienes (como un coche o una casa).
- Ingresos en el extranjero o intereses bancarios superiores a los 20 mil pesos anuales.

¿Qué pasa si no presento mi declaración anual?
Omitir la declaración anual no siempre implica ir a prisión, pero sí puede tener repercusiones importantes.
La primera consecuencia es una multa económica que puede ir desde los 1,810 hasta los 22,400 pesos, según el Código Fiscal de la Federación.
Además, si la omisión se considera intencional y hay elementos de evasión fiscal —como ingresos ocultos o facturación falsa—, el SAT puede iniciar un proceso penal.
El artículo 108 del Código Fiscal establece que la defraudación fiscal se castiga con penas que van de tres meses a nueve años de cárcel, dependiendo del monto evadido.
¿Qué hacer si no he presentado mi declaración?
Si no presentaste tu declaración anual y ya se venció el plazo (generalmente el 30 de abril para personas físicas), lo mejor es corregir la omisión lo antes posible.
El SAT permite presentarla de manera extemporánea sin necesidad de acudir a una oficina. Solo necesitas tu RFC, contraseña o e.firma.
También puedes aprovechar facilidades como la declaración prellenada, que reduce errores y agiliza el proceso.
Si detectas inconsistencias o recibes un aviso del SAT, no lo ignores. Acércate a un contador o consulta directamente a través del portal del SAT para regularizar tu situación.
En muchos casos, resolverlo a tiempo evita multas mayores e incluso procedimientos legales.
De hecho, el SAT ofrece programas de autocorrección fiscal, especialmente si no hay intención dolosa.

¿Entonces, puedo ir a la cárcel?
Presentar tu declaración anual no solo es una obligación, también es una oportunidad para obtener saldos a favor y demostrar responsabilidad fiscal.
No se trata de temer al SAT, sino de actuar con claridad, orden y compromiso.
Recuerda: la cárcel solo aplica en casos graves de evasión fiscal. Pero si dejas pasar los años sin declarar, los problemas sí pueden escalar.
Guía Prodecon para presentar tu declaración anual, conoce cómo usar a tu favor este documento
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